Tiempo para explorar nuevas posibilidades, nuevos amigos, nuevas formas de aprender. Tiempo para desarrollar esas capacidades innatas que todos tenemos y que nos gustan porque nos generan satisfacción personal, sensación de éxito, seguridad y buena autoestima. Además, nos encontramos con otros que disfrutan exactamente de lo mismo.

Personalidades con los mismos intereses, habilidades y gustos con los que se pueden entablar lazos de amistad y de enriquecimiento personal, sin importar la edad. 

Hay lugares especializados, con gente profesional en cada una de esas áreas y apasionada por enseñar habilidades, destrezas y  talentos especiales. 

En toda ciudad cerca de nuestro lugar de vivienda, existe la oferta de centros de desarrollo que estimulan las habilidades artísticas, lingüísticas (idiomas), científicas, atléticas, tecnológicas y hasta de crecimiento personal. 

Esos lugares ofrecen programas especiales de pintura, escultura, natación, gimnasia, robótica, habilidades para hablar en público, fotografía, tenis, karate, guitarra, piano, atletismo, yoga, baile etc, etc, etc; en fin, no pararía de nombrar todos esos programas de los cuales pueden sacar provecho los hijos e hijas para estimular nuevas áreas de su intelecto y capacidad corporal. Lo que necesitan es tiempo para hacerlo y un colegio con mensualidades conscientes, que le permita a los padres de familia poder invertir en la estimulación y desarrollo de habilidades no académicas de sus hijos e hijas. 

La mayoría de las veces estos programas son  tomados como segunda opción; como para que hagan algo más, después del colegio. 

Los invito, si me lo permiten,  a que sean disruptivos en su pensar y empiecen a ver estos lugares con otra óptica. 

Yo pienso que no es necesario que los niños y niñas estén tanto tiempo en el colegio. Pienso que la formación académica del colegio es igualmente importante a la formación no académica. Pienso que es importante que ellos y ellas inviertan tiempo y no el que sobra, en la exploración y desarrollo de sus habilidades innatas. Esto haría más motivante todo proceso de aprendizaje. Podrían ser mucho mas empoderados y seguros. 

Los invito a que consideren que lo que antes era complementario en la formación integral de los hijos e hijas, ahora puede ser más importante o al menos igual de importante a su aprendizaje académico. 

Los dejo con ese pensamiento por esta semana y la entrante cerraremos con este tema. 

Nosotros en SabemosComo, te asesoramos en el plan de desarrollo integral de tus hijos e hijas.